El proyecto tiene como objetivo formar a profesores de formación profesional para que puedan incluir contenidos de energías renovables en sus clases.

Dentro del interés de la Fundación Ingenieros de ICAI  por promover el conocimiento y el uso de las energías renovables y tras el éxito del primer curso impartido sobre energía fotovoltaica, se ha llevado a cabo entre el 24 de junio y el 28 julio pasados un Curso on-line de tecnología minieólica para la generación de electricidad en sistemas aislados. Este curso supone un esfuerzo más realizado por la Fundación Ingenieros ICAI con la finalidad de ir generando espacios de colaboración para el fortalecimiento de la Educación Técnica en los Centros de Fe y Alegría, en el marco del acuerdo que mantiene con la Fundación Entreculturas – Fe y Alegría.

El curso pretendía formar a profesores de distintos niveles, principalmente de formación profesional. Ha contado con un nutrido grupo de participantes pertenecientes a una amplia representación de países hispanoamericanos: Bolivia, Venezuela, República Dominicana, Perú, El Salvador y Nicaragua.

Los contenidos del curso y las tutorías correspondientes han sido desarrollados por un equipo de cuatro voluntarios de la Fundación.

El primero de los cinco módulos que constituían el curso se ha centrado en el viento como fuente de energía y se proponía optimizar el emplazamiento de los aerogeneradores, para lo que se daba formación tendente a conocer y valorar el origen del viento, su variación y su potencial. En segundo lugar se ha abordado la tecnología eólica, en qué consiste un aerogenerador y sus principios de funcionamiento. La Instalación de sistemas de energía eólica ha sido el tema del módulo III donde se pretendía formar a los asistentes para que fueran capaces de llevar a cabo una instalación eólica a pequeña escala teniendo en cuenta los elementos requeridos. Los últimos dos módulos se han centrado en la Gestión y mantenimiento de un sistema eólico y en los Sistemas complementarios (sistemas híbridos).

El objetivo es que esta colaboración continúe con nuevos cursos que den herramientas a los profesores de Fe y Alegría para que vayan introduciendo estos contenidos en sus clases.

El transportista, primer beneficiario en los inicios del Proyecto, está saliendo adelante con muchas dificultades, ya que algunos días no consigue ninguna carga o la cooperativa a la que pertenece le da una carga mínima pero tiene que recorrer un montón de kilómetros en el mismo día, sin contar, además, con las necesarias reparaciones en la furgoneta. Ha habido meses que no ha podido pagar o sólo lo ha hecho con parte de lo comprometido, pero siempre dando razones suficientes para alargarle el periodo de amortización.

En estos casos la labor del tutor tiene un componente más técnico, requiere conocimientos o experiencia para establecer un Plan de negocio y un estudio de viabilidad, pero la proximidad y el apoyo personal son siempre imprescindibles. Esta figura, que desde el principio parecía importante, se ha reafirmado desde la experiencia. Sus características personales, la facilidad para relacionarse y el sentido social de su dedicación son un complemento fundamental de la capacidad, experiencia y entusiasmo por su labor.

No faltan situaciones especiales como ha sido la vivida por un locutorio en Leganés. Inicialmente se dio un préstamo de 6.000 € al solicitante, de nacionalidad salvadoreña, para ayudarle a pagar el traspaso del negocio. Con este importe mejoró el negocio e incluyó la venta de bebidas y chucherías; permanecía todo el día, hasta bien entrada la noche, en el locutorio. Fue amortizando el préstamo mensualmente y sin problemas, a la vez que mejoraba el negocio y, con sentido comercial y trato amable, fue haciéndose con una clientela importante. Cuando decidió regresar a su país nos ofreció traspasar el negocio a quien propusiésemos.

Fue una estupenda oportunidad para Adama y Meiga, senegaleses que estaban buscando un local para el mismo uso. Con un préstamo de 12.000 € para amortizar en 40 meses, pagaron el traspaso, las existencias y los nuevos contratos, y han resuelto su futuro inmediato.

Esta experiencia demuestra, una vez más, que el trabajo bien hecho, con interés, mucha dedicación y trato adecuado a los clientes, casi siempre proporciona una buena forma de ganarse la vida, y el apoyo de un tutor con experiencia, siempre disponible, y decidido interés en ayudar, también da sus frutos.

Todas estas experiencias ayudan a definir mejor el papel y las características de los tutores y permiten establecer un perfil teórico para los mismos, en el que muchos profesionales jubilados pueden verse reflejados. Aspecto importante a destacar es el carácter de «a la carta» que el trabajo del tutor tiene, ya que habitualmente podrá establecer las reuniones con el emprendedor a su mayor conveniencia con lo que el tiempo de dedicación al proyecto es fácil de administrar.

La oportunidad del Proyecto en esta situación actual de crisis es manifiesta y las necesidades de colaboración, tanto con donativos como, especialmente, actuando como tutores, siguen siempre abiertas.